sábado, 31 de mayo de 2014

CURIOSIDAD


Curiosidad es esencialmente búsqueda de información, de códigos que coincidan con lo que el genoma contiene como información de sobrevivencia. Un gato buscando en un basurero. Obviamente, no busca una gata para copular, busca un pedazo de algo comible y siente curiosidad por lo que se mueve, se siente curioso por el olor que llega a sus centros cerebrales. Curiosidad es un asunto informativo, de allí la gente pasando su televisor de canal en canal, cosa difícil en el pasado que no había control remoto. Y es que este control remoto es un pequeño símbolo además de un artefacto que a veces se nos pierde y nos sentimos desconcertados, muchas veces se nos cae y tenemos la esperanza de que no se haya dañado. Es un nuevo personaje que nos facilita la curiosidad, la búsqueda de una información que nos haga feliz por un instante, es decir que nos permita simbólicamente sobrevivir a nivel de imagen, imaginación, campo de aterrizaje a las búsquedas no expresadas, cuya base sigue siendo complejamente genética y orientada hacia la dinámica insatisfacción-satisfacción.

El autismo al igual que muchas otras enfermedades nos confrontan por la vía negativa hacia estos temas de la curiosidad. Parecen ser curiosos, parecen no serlo, desde nuestra percepción, salimos confundidos porque tenemos patrones definidos de la curiosidad en virtud del aplauso, del encontrar el Berger King en el camino o simplemente el sanitario donde depositar las incómodas heces que nuestros organismo ha depurado, gracias a la codificación biológica para seguir reproduciendo la vida.

Volvamos al asunto que nos interesa y agreguemos algún objeto aplicable. Sin curiosidad moriríamos. Si desaparece o disminuye la curiosidad la vida, la ciencia, el amor y el arte irían desapareciendo.

En los individuos jóvenes se expresa más la curiosidad. El autor del Eclesiastés bíblico no tiene mucha curiosidad, para él no hay nada bajo el sol, no así para el Apocalipsis de Juan, el futuro es profundo, tanto que la narrativa apocalíptica salta no solo como consuelo frente al desaliento sino como complejidad cósmica frente a las fuerzas conocidas y desconocidas que apuntan hacia los armagedones y hacia las nuevas Jerusalén.

Si los jóvenes son más curiosos, de ellos va a depender la sobrevivencia y la constructividad de las nuevas sociedades. Eso es un hecho y por lo tanto las fuerzas satánicas, destructivas, tienen como principal allegado a la juventud que busca y lo hace muchas veces en espacios sumamente peligrosos como la adrenalina estimulada a lo máximo, en las drogas y en muchos otros desaciertos desde el punto de vista de la sobrevivencia, los tales, esas prácticas descontroladas y tóxicas no sólo perjudican el presente propio sino que se convierten en elementos epigenéticos que trasmutaran hacia las nuevas generaciones. Esto es así, no lo podemos quitar de la realidad. Los jóvenes experimentan lo tóxico buscando curiosamente la sobrevivencia holística y crean demonios que vivirán de alguna forma reciclados en sus hijos y nietos.

Por otra parte y de forma exclusiva, una juventud curiosa quiere abrirse paso por medio de contenidos positivos, saludables, pero como la vida no es maniquea sin duda se producirá una mezcla. Cuál será la mezcla en los próximos cincuenta años, cual el futuro de una nación o territorio. Seremos sin duda esa mezcla entre lo que plantea Eclesiastés y las posibilidades apocalípticas.

Entre la curiosidad mórbida y la curiosidad creativa. Entre lo curioso destructivo y lo constructivo se abre un espacio de la curiosidad residual. Con esa se tendrá que manejar el ser humano siempre. El robar el fuego a los dioses o comer el fruto prohibido, es danzar entre los abrojos y espinos de lo morboso y las luces de la ciencia desconocida, que redundan en una tecnología fruto de la curiosidad que se ve evacuada en los sistemas más sofisticados de diversión.

La sobrevivencia buscada desde la curiosidad, va mutando hacia lo divertido de una sociedad saturada y deseosa de mayor curiosidad a bajo costo: religión divertida, matemática divertida, comida divertida, sexo divertido y por supuesto sufrimiento divertido, o simplemente la cara divertida del sufrimiento.

Con esos ingredientes se llega a un siglo XXI que produce guerras divertidas y busca una política igualmente divertida. Cómo hacer divertida la marginalidad. Por supuesto que por medio de una O.N.G. algo realmente divertido, curioso y aparentemente humano y revolucionario. La revolución divertida ya no de paz y amor de los hippies, sino el concierto de inversiones divertidas, para seminarios, congresos y eventos de sala de hotel de seis estrellas, las de cinco quedarán en el pasado siglo anterior, hoteles, repetimos, por decir salas de glamour de humanismo sentimental donde se construye de forma fantástica esa gran revolución de lo divertido, a partir de las curiosidades de los sufrimientos reales, pintados con el condimento de lo entretenido.

Estamos en un mundo en que todo debe ser lúdico, entretenido y curioso. Comidas curiosas, libros curiosos, series de televisión curiosamente tensas y catárticas buscando lo transferencial.

Aterricemos. Un niño llamó al aeropuerto y les informó de una bomba en el avión cuyo vuelo se vio trastornado por la curiosidad de saber qué realmente pasaba. No fue divertido. Pero para la mente del chico sí lo fue. Este chico nos gobernará dentro de una década.

La curiosidad del científico inventan la diversión financiera del laboratorio que negociará su talento, vendiendo la mercancía a los usuarios y aquellos que no puedan adquirirlo por ser del mundo no divertido de la pobreza, se sentirán curiosos de cómo obtener los beneficios del maravilloso vinagra desconocido hasta la fecha en que vio la luz, esperanza química para un público impotente, una humanidad que teme la decadencia sexual y se precipita hacia la curiosidad erótica y pornográfica en búsqueda del famoso orgón de Wilhelm Reich. Lo que pasa es que las O.N.G. no regalan sildenafil, pero sí preservativos. El control de la natalidad es una agenda de un orden diferente al de la distribución de placer para las impotencias o más decentemente las difusiones sexuales.

La curiosidad está metida en agendas, en archivos como los de la computadora, y los mismos son de propiedad política de los dueños del mundo. Se seguirá utilizando gasolina como combustible para automóviles mientras los dueños de las guerras tengan de dónde sacar el petróleo.

La curiosidad va al ritmo de estas agendas. Pero como tienen su compulsión propia, se desborda y aparece en forma de patología, de dolor social, de chamanismo, de asalto a la planificación de los agendadores. Esa curiosidad que no acepta hacer la fila y esperar su turno, se transforma en sorpresas aleatorias, gobiernos de personajes folclóricos, de izquierdas recicladas, de religiones asociadas con lo que menos nos pudimos imaginar, teología de la liberación con diversidad sexual, marxismo con empresa privada global, la bisexualidad como amenaza indefinida y la nueva normalidad, antigua patología hoy vista como virtud escapada del tiempo definido por las agendas. En agenda está el matrimonio de personas del mismo sexo, pero sin duda esa curiosidad por lo no convencional que representa ese fenómeno se escapa y amenaza sociedades africanas y latinoamericanas conservadoras que se resisten no solo a eso sino a tener mujeres en el sacerdocio romano, temas de agenda política que obligarán a esa institución a doblegarse frente a la nueva religión curiosa de las nuevas agendas recreativas del nuevo orden mundial. Todo es cuestión de tiempo y aleatoriedad.

La curiosidad mató al gato, dice un dicho. Pero los demás gatos aprendieron.

La curiosidad mató el viejo paradigma, aunque sobrevivan sus sombras. Pero, los demás humanos aprenderán a sobrevivir y crear nuevas estructuras de convivencia y economía social.

viernes, 30 de mayo de 2014

ESCENARIOS





Un escenario es el lugar donde se desarrolla un drama. El drama es en sí la vida misma, manifestada en diferentes tipos de escenarios.

El predicador en un público es un escenario y un drama cuyo propósito es cautivar al que escucha, como lo es la guerra, escribiendo con sangre el destino político y socioeconómico posible.

El proscenio marcó al occidente y sigue haciéndolo debajo de la cultura que se ha formado. El público al lado de la escena. Los protagonistas son los que conducen los hilos del destino. Una postura de proscenio nos acompaña por siglos en que los más capaces aparentemente, los que tienen el poder de representar el dra y se les otorga la profesión son los actores que se lucen frente a un público que está al lado del escenario, riendo, llorando, con la boca abierta y las manos listas para aplaudir.

En el escenario de plataforma, el público aparece rodeando la actividad de los actores desde tres lados. La vida rodeada por tres lados, de forma que está bordeada por la observación emotiva, mientras sigue la historia realizando allí, generalmente la tragedia, la comedia o simplemente el monólogo de un solo sujeto político, por decir humano, que canta o llora, motiva o desmotiva a seguir adelante.

El escenario circular nos presenta la vida en sí misma como circo o corrida de toros, en que la crueldad, la tensión, la adrenalina, el destino fatal de un animal o el dolor de los payasos, están allí, junto al riesgo del trapecista y los feroces leones domados por intrépidos hombres que los hacen comer en sus manos.

Esos escenarios han ido desplazándose hacia los virtuales, donde la vida pasa de ser real por un tiempo a ser global, a definirse dentro de lo puramente virtual sobre la base de la tecnología y el internet. El escenario ha variado y el ser humano sigue inquieto buscando el más apropiado para desarrollar su papel y encontrar la satisfacción a su necesidad, sus inquietudes, preguntas y el aprovechamiento o desaprovechamiento del tiempo, trasfondo activo en todo escenario.

Cuándo se plantea el desafío o el corte de lo convencional, justamente cuando se rompe el proscenio, es decir cuando el autor rompe la cuarta pared, así llamada en el teatro y se dirige al espectador, es decir al ser humano real.

Cuando un ser humano, se sale de su proscenio podrían ocurrir situaciones nuevas desde el punto de vista de la conciencia. Cuando el presidente de la República deja a un lado el protocolo y se interesa de verdad aunque sea por un problema humano y baja a cuestionar o estimular al que se considera espectador y le hace ver que es un agente activo, entonces ocurre una toma de conciencia o por lo menos una variable que rompe con la pared entre escenario y realidad. La delimitación en tres planos deja de ser un mito y el rompimiento del cuarto, siguiendo la teoría teatral y llevándolo al plano de la realidad, hace que la falta de comunicación a causa del miedo a lo establecido desaparezca por lo menos unilateralmente y se puede abrir un hueco, un respiradero para la mente, para la conciencia, para pensar de forma más dinámica y buscar juntos mejores soluciones sociales. Es como la profecía de un bloque histórico como lo llamaron en las décadas pasadas. O en una antigüedad mayor en el arte dramático las figuras de Konstantin Stanislavski y Bertolt Brecht.

Los nuevos escenarios de las alternativas y las diversidades tienen algo de positivo, no todo son las O.N.G. chupando la sangre de estos momentos de rompimiento de escenarios tridimensionales. La diversidad, las alternativas, las nuevas corrientes de lo diverso dentro de lo holístico son cuatri.-imensionales, no solo el 3D de las películas que nos hacen ver las cosas tan cerca como si estuvieran en nuestros ojos sino el 4D en que se nos mueve el asiento en el cien mientras ocurre un terremoto en la pantalla.

Las cosas que están ocurriendo en la pantalla de nuestros celulares inteligentes, los nuevos escenarios del twitter nos están haciendo estremecer en cuarta dimensión, tanto de forma morbosa  como los extremos del ciber-sexo como nuestra posibilidad de ser parte de un cambio de situación mediante una red que pretenda una determinada causa. El escenario ha variado, por ende también cambiará toda la vida humana. Nos preguntamos si la democracia en cuanto a paradigma, las religiones, en particular el cristianismo en el que hemos vivido en nuestros países de occidente, y las forma sociales, éticas, protocolarias actuales, aguantarán el rompimiento de la cuarta pared y comience la fuente amniótica   a romperse exigiendo un nuevo escenario para un nuevo ser que como especie quiere ir emergiendo.

miércoles, 28 de mayo de 2014

NECESIDAD


Maslow ha sido muy conocido por su clasificación sobre las NECESIDADES.
Parece ser que satisfizo una de las necesidades de la gente la de que le explicaran las necesidades en sí mismas. Para él, éstas podían clasificarse someramente en el siguiente orden:
Necesidades de comida, bebida, vestimenta y vivienda.
Necesidades de seguridad y protección.
Necesidades de pertenencia: afecto, amor, pertenencia y amistad.
Necesidades de autoestima: auto- valía, éxito y prestigio.
Necesidades de autorrealización: de lo que uno es capaz, auto- cumplimiento.
Lo interesante de la dialéctica de la necesidad es que internamente está gobernada por el deseo. Sin deseo la necesidad no tiene lírica, carece de expresión, de llanto, de gemido, de sensación previa, en el medio y al final de su satisfacción.
Es un complejo químico, psíquico y social, que por supuesto está vinculado entrañablemente con las adicciones y con la política.
La política trabaja en su cara proselitista y de búsqueda del poder, o simplemente de la imposición del mismo por medio de esta triada de elementos, deseos, necesidades y expresiones. La fotografía, es una imagen, tanto del niño pobre en expuesto al público, como la del político o la de Teresa de Calcula recogiéndolo de una calle de la India.
La finalidad de la imagen vuelve a ser política, no sólo electorera o ideológica sino también comercial. Una imagen vende en la medida que ofrezca la satisfacción de una necesidad mediante el disfrute del deseo, que aleje el dolor y acerque el placer. Mórbidamente también al dolor como patología del binomio sadomasoquista.
Al ser la necesidad un asunto biológico, llevado al escenario político, de la polis, tanto electoral, como comercial, a la polis de las ágoras del mundo mercantil, se vierte en fenómeno religioso. Lo sagrado es para de lo mágico, sociológica y antropológicamente hablando y dar el salto de la oferta de la satisfacción de las grandes necesidades mediante el alcance de un objeto en un instante, cosa que es mentira, pero lo mágico no es en sí verdadero, sino una ilusión de lo real, repetimos la oferta se transforma en deificación. Las fotografías de los políticos mediante las técnicas modernas de maquillaje y seducción para las masas, parecen no solo hombres buenos, sino portadores de fuerzas, poderes capaces de convertir este valle de lágrimas en ríos de agua vida. Lo mismo que la cerveza o la mantequilla anunciada a través de una atractiva modelo de belleza de las pasarelas internacionales. Modelo de belleza que esconde la más triste fealdad, la realidad de miles de niñas y muchachas escondidas detrás de esa imagen y que sufren la enorme marginalidad, la frustración, los enormes trastornos de las jóvenes de la clase media, con toda y su santa bulimia, anorexia e intentos suicidas al estilo de cualquier sujeto con trastornos de personalidad, especialmente, el de doble fotografía en la psiquiatría, nos referimos a la bipolaridad y a las de múltiples fotografías como el trastorno límite de personalidad, o la patología mayor de las múltiples personalidades. Todas caricaturas de lo que son las fotografías del político en una valla callejera, la de una exquisita modelo o la de una hamburguesa o mega hamburguesa maquillada por medio de las técnicas de pintura simulando las delicias de la salsa de tomate y las sensaciones de lo horneado con calores sacrosantos.
Si las necesidades, apuntalados por los deseos y la política en la oferta de lo ideal salvífico, podemos decir sin temores excesivos que la sotereología gastronómica o de las ofertas públicas, sean políticas o sean religiosas, como también culturales, ecológicas, psicodélicas, el spa de la nueva economía, no compite para nada con la vieja sotereología calvinista de la predestinación, ya que la primera, la del consumo inmediato de una religión leight no necesariamente cristiana, le ha ganado la partida a las viejas filosofías y discusiones en torno a temas arminianos, pelagianos, agustinianos, aristotélico tomistas y hasta lo que pueda pensar el vaticano o los nuevos Billy Graham.
El punto estaría en cómo convertir a un Francisco de Asís, de corte jesuita, en una hamburguesa apropiada para unificar los valores perdidos con la posmodernidad fotográfica. En esos ensayos está la posmodernidad y la vaticana en particular. Entre paréntesis, la fotografía vuelve a tomar un espacio importante en los escenarios de la historia por fija, frizza, la imagen que requiere ser estampada en la mente, contrariamente al video que se asemeja más a la vida en movimiento y que es tema de cines más que de promoción de lo ideal paralizado como ídolo para ser adorado. De esos que los judíos recomendaban no arrodillarse frente a ellos aunque llenaron su propio templo de figuras bajo el calor de la influencia de los pueblos paganos.
Hacia dónde concluye nuestra reflexión, a que las necesidades convertidas en imágenes, cuyo resorte nervioso está en el deseo, nos está llevando a una sociedad adicta en todos los niveles y política en todas las dimensiones, incluyendo como repetidas veces lo hemos dicho en otros artículos, la religión, no como opio del pueblo, sino como estimulante a un reino ahora, el de comer y beber, necesidades indiscutibles en lo básico pero desaforadas en sus expresiones más refinadas del mercado mundial.
Las grandes necesidades convertidas en fotografías sociales han venido a ser también políticas. Los pueblos hambrientos, los niños con parálisis, las mujeres y hombres con sarna o sida, han sido asimilados como una religión de estímulo a la consecución de recursos por medio de organismos que participan en el círculo político y religioso mundial.
Esta la dimensión macro.
En lo micro de cada individuo, si este ha tenido el privilegio de estar en las sociedades del mercado, esté donde esté, con algo se puede satisfacer en su necesidad básica, pero no en su necesidad politizada.
Tenemos un sujeto insatisfecho que clama por corrientes de agua que sacien su sed y no lo logra.
Será que esta es la naturaleza humana que tienen a conseguir nuevos niveles evolutivos. Será que así tiene que ser el proceso para poder llegar a dónde no se ha llegado.
O podría existir otras alternativas, digamos más saludables. No me refiero a la política convertida en alternativas del vegetarianismo o cosas parecidas, que pueden ser muy valiosas en sus conceptos puros, pero sabemos que es otra ideología más, como la de un francisco de Asís para un siglo XXI.
Cuando hablamos de alternativas nos referimos a algo que no conocemos. A una salida victoriosa. A un real rescate del hombre, mediante un uso racional de sus necesidades, una satisfacción coherente y una construcción de su medio por los caminos no de la política fotográfica sino de sentimientos más elaborados como la misericordia. Nos empujamos a creer que no. Excepto si se produce una ayuda externa, no necesariamente humana. Nos referimos a una intervención del creador, a un soplo del Espíritu de Dios que traiga cambios verdaderos en el cerebro, el alma, la psique y todas sus formas de ser. Nos referimos al poder del amor. Nos referimos a una esperanza simplemente, frente a un mundo que va a colapsar tratando de lograr el gran orgasmo psicótico extraído de la médula de su propio ser, y no de su coherencia entre su pensar, sentir y actuar sino en contra de su propia conciencia. Se está sacrificando la conciencia obtenida en los altares de los deseos virtual y realmente manipulados. Estamos en un escenario peligroso. Pero, tenemos la fe, la esperanza de una salida

viernes, 23 de mayo de 2014

El morbo del poder

Lo morboso es anti-fóbico . No tiene miedo al poder el que gusta del mismo, todo lo contrario tiene un apego entusiasta, enfermizo. Hay quien busca el poder porque es un enfermo y también quien después de ejercerlo se enferma de la mismo, del morbo por el poder. Los fóbicos del poder se mantienen alejados, pero los igualmente mórbidos se mantienen alrededor del que lo ostenta por la vía que fuera.
Las sociedades se organizan en torno a intereses y los mismos funcionan a través de elementos sistémicos y estructurales como lo es el poder. Siempre ha habido este tipo de relaciones desde el comienzo de la historia humana. El ejercicio del poder es un tema de la político, pero la legitimidad del mismo apunta hacia lo filosófico, axiológico, teológico y hasta teogónico, Siempre el poder requiere de unos dioses que lo avalen, legitimen y amenacen a los demás con temores de ultratumba si no se someten a lo que llaman poder natural, poder querido por la divinidad, poder delegado.
Y la religión ha sido la principal fuente de validación de los poderes y sus acciones muchas veces en contradicción flagrante, cuyas huellas y cicatrices no requieren de más evidencia en la historia social y humana.
Las izquierdas ateas recurrieron a otros conceptos filosóficos para justificar sus horribles crímenes, mientras que el fascismo era apadrinado por el catolicismo y las violencias de Calvino por la teología reformada. Siempre los gobernantes han buscado sus sacerdotes.

El asunto de nuestra reflexión consiste en afirmar de manera hipotética que en la justificación del ejercicio del poder, siempre injusto, mucho menos en las sociedades que cuentan con un estado de derecho funcional, pero siempre opera el poder oculto, discriminatorio, corrupto y corruptor, volvemos a decir, que en esos ejercicios de justificación opera desde una morbosidad que requiere a su vez seres humanos igualmente morbosos. O sea, siempre ha habido gente entusiasmada por tener una cuota de poder, sólo por el sádico deseo de sentirse por encima de los demás, posiblemente por el mismo sentimiento de inferioridad que nos produce la convivencia humana y las amenazas de no alcanzar la comida, la seguridad, miedo a la enfermedad sin apoyo, a la soledad del desprotegido socialmente, y finalmente a la muerte a la cual todos vamos a llegar, poderosos y no poderosos.
Entonces que diremos, parafraseando a la carta del Apóstol Pablo a los Romanos, que todo ejercicio de poder es morboso, que todo ejercicio de los cargos tanto en la empresa privada como en la pública está teñida de esa infecta situación. Qué diremos , que mientras ese poder se haga funcional, pragmático y sus resultados alegren a los que tienen aún más poder en la jerarquía institucional, tendrá respaldo. Y qué decir del poder de la sociedad civil, que es otro morbo pretendiendo ser los agentes de los derechos de todos pero expresado en O.N.G. que buscan de forma oportunistas bajo los lemas de enormes causas a la vista dignas, constituirse en un poder que use el morbo de la llaga herida del pobre, del ulceroso, del sidoso o del hambre de los demás. Nos decía hace algún tiempo un religioso, que era necesario usar la pobreza para abrirse camino y conseguir el financiamiento de parte de países y grupos ricos, siendo la verdad que una parte se queda en las arcas de algunas instituciones.
Qué diremos que todo poder está teñido de ese morbo. Sin duda alguna creemos que sí. Esto es humano e innegable.
Por una parte el mundo rico trata de limpiar su conciencia con la causa pobre y sus intermediarios morbosos por medio de las O.N.G. limpian, lavan estas conciencias y obtienen como resultado ganancias que se van quedando en el tren burocrático, sino corrupto, ideológico, o tramposo de sus dueños, generalmente gente metida y entremetida en la política. O h mundo tan mundano, dirían los místicos revolucionarios que siempre han tratado de buscar de Dios alejándose de los poderes de esta tierra.
Qué diremos, que el mundo es político y por ende morboso, por su puesto que sí. Esa es la realidad pringada de excepciones que sin duda son silenciadas aparentemente pero se convierten en temas incómodos que terminan afectando la historia. Gandhi es un claro ejemplo de ello. La India quizá siguió tan pobre o más, tan llena de poderes diversos y morbosos, pero después de este hombre el mundo entero no ha podido dormir tranquilo. Fue creador de una nueva conciencia.
L a enseñanza del Señor de Galilea, tomando una cubeta y lavando los pies a los discípulos y dando su vida para rescatar la humanidad, marcó el mundo. Desde allí todos los humanos que han conocido su nombre han tenido que pegar en esa piedra de tropiezo, convertida por muchas iglesias no solo Roma, en un producto morboso para dominar a los demás y sacarles el dinero de sus entrañas. Hoy lo vemos todos los días en la televisión de los tele maratones. Intento no lejano a los que quisieron convertirlo en el Che Guevara de la teología de la liberación forzando su perfil hasta llevarlo a asumir luchas políticas muy extrañas a su perspectiva. Otros queriendo convertirlo en un defensor de los derechos de aquí y de allá, con los mismos nombres de Jesús el Cristo con que en algún momento se perseguía a los herejes y se quemaban brujas. La enseñanza del hombre de Nazaret ha trastornado la historia dejando no solo una teología lejana a él, ideología justificadora de la morbosidad religiosa sino un auténtico sentimiento, que se llama el amor ágape, el servicial, el oblativo y sacrificial. En otras palabras la posibilidad de un ejercicio del poder desde el servicio y amor. Parece romántico, pero no por eso imposible. Parece romántico y no por eso fuera de lo humano. Mucha gente se casa porque ama, no porque haya calculado la cuenta bancaria del otro, buscando el poder morboso del poder del dinero o disfrutando del poder sádico de una relación sexual, que pudiera ser un acto, un símbolo, una satisfacción y realidad llena de generosidad mutua.
Qué faltará para que el ser humano de un salto y pueda separar el poder de la morbosidad. Cuando estará sobre esta tierra o una nueva tierra, un nuevo ser humano que no justifique en nombre de Dios ninguna revolución violenta, ningún sistema opresor, ninguna relación de subyugación. Utopía . Si el hombre tiene utopías es porque ve posible algo mejor. Así lo buscaron los revolucionarios socialistas que imaginaron el ideario comunista. Pero, cuáles son los medios. Alguien muy amigo me dijo que la guerra era parte de la política y que si era necesario reventar un poco de gente para que existiera una mejor social habría que hacerlo. Pero, no existirán otros métodos, cuánto tiempo duraremos ejerciendo el poder morboso hasta lograr ver la posibilidad de una sociedad de servicio más amable. Lo grave del asunto es que a través de la ilusión nos hacen ver posibles utopías, mediante actos sencillos de consumo que lo único que producen es obesidad, no sólo física sino del ego. Obesos de morbosidad, hinchados por el poder. Basta con darle un carguito a cualquier hijo de hombre, a cualquier hombrecito de la calle, para que busque a otro más pequeño que él, oprimirlo, maltratarlo, abusarlo como dice una bachata de grata memoria por su autora, y de esa forma esa hombrecito sentirse más fuerte frente a ese otro hombrecillo. Así que no solo es un asunto de la relación patrón obrero sino de la relación del hombre con el hombre, menos machistamente , del ser humano con el ser humano.
Pareciera que todo se reduce a buscar a alguien a quien oprimir para celebrar el rito de sobrevivir, es simbólico, como también lo es el dinero, que a su vez es canjeable por plátanos y Coca Colas en la tienda de la vida económica, sólo que esta vez, ese símbolo se intercambia por privilegios, por limosnas, por tiliches que los que tienen algún poder mayor y más estructurado puede ofertar por cada acto vandálico de ejercicio morboso del poder. Esto no sólo se ve en el mundo de la mafia organizada, sino en cualquier barrio comandado por un cacique, o en las grandes transnacionales y en la gestión de países ricos, países pobres y países intermediarios.
En todo lado la morbosidad, hasta y sobre todo en las iglesias.
Solo Jesús mi Dios y gente como Gandhi y otros anónimos, aún en la estructura formal, como la recordada mujer de Calcuta, son símbolos de algo diferente. Me gusta esa diversidad, la de aceptar que hay seres humanos precoces en la evolución espiritual, llenos de gracia como María, lo digo sin ser católico, aunque quien deja de serlo del todo, la que llamarán bienaventurada todas las generaciones o las de un Juan el Bautista del cual el Nazareno dijo que no había hijo de mujer más grande en esta tierra que ese que comía empanadas, traducido como grillos, y miel silvestre, una voz que salió de las cuevas monásticas y cansado comenzó a ser la voz que clamaba en el desierto. Cuántos hoy están clamando en el desierto, quizá sean pocos, pero los encontramos en el camino, haciendo el trabajo grano a grano, tal como se llena la gallina el buche, en este caso el buche de una imaginación santa, la posibilidad de un Reino de servicio y amor.

jueves, 22 de mayo de 2014

El apóstol Pablo y la diversidad

El Jesús histórico era en parte afín a la diversidad, en sus parábolas, sus gestos y dichos hay evidencia de ello. Los hamartoloi, pecadores empedernidos a los cuales se les llamaba previo arrepentimiento, él los llama tal y como están porque el Reino se establecería en poco y las prostitutas estarían primero que los arzobispos de la época, los saduceos. Pero no observa mucha diversidad en cuanto a dedicarse en primera instancia a los gentiles, a los cuales llegó a comparar con los perros que los amos no darían la comida de los hijos, no obstante asombrado por la fe de algunos de ellos que insistían con mayor fe que los mismos judíos que eran su objetivo primordial, ya que a através de Israel vendrían las naciones al cumplimiento de las promesas dadas por Abraham. Pero Jesús murió. Y la resurrección trajo consigo a Pablo, sin el cual el cristianismo no hubiese pasado de ser un grupo más entre los existentes. Por eso Pablo es tan importante, porque marcará toda la historia del cristianismo hasta el día de hoy, a esta misma hora en que ud. está leyendo este artículo.
Y cómo entender el Pablo de frente a un fenómeno que se parezca a la diversidad, tema que hoy está siendo el talón de Aquiles y el aguijón que está haciendo pensar a políticos y a algunos religiosos inteligentes, porque hay muchos, que siguen dormidos y los cogerán como dicen por estos barrios “asando batatas” distraídos y refugiados en un cómodo conservadurismo evitativo.
Si una teología cristiana no cuenta con el paulinismo no tiene muchos futuro en ninguna vertiente del cristianismo porque Pablo es la fuente de todos.
Romanos 3,31 versículo que se saltó Lutero por asuntos ideológicos , anulamos la Torá por la fe, de ninguna manera. Del 1 al 9 llega un punto Pablo que dice ser judío y estar dispuesto a morir por sus hermanos judío. Así que aún Pablo buscando el ingreso de los gentiles mediante injerto a Israel y a los israelitas introducirlos a Cristo.
Dónde está la diversidad en Pablo, en la búsqueda de una síntesis en la que los puntos en contacto no renuncien a lo que son. En I Corintios dice que cada cual se quede a como es en realidad. En otras palabras los judíos que vengan a Cristo, no se eximen de seguir con las obras de la Ley, pero los gentiles que entran al judaísmo por medio del mesianismo de Jesucristo, pues no están obligados a seguir dieta kosher de Israel. Esta propuesto traía problemas, por una parte de los prosélitos, o sea aquellos que se habían hecho judíos y habían tenido que circuncidarse y estar obligados al cumplimiento de toda la Torá. Ahora viene este Pablo regalando pasaportes al judaizmo sin tener que cumplir las obras de la ley, sino solo a través de la fe en Jesucristo, proponiendo de esa forma imitar al padre de la fe, Abraham, el cual alcanzó la amistad de Dios sólo por la fe, sin necesidad de la Torá.
Este rompimiento de Pablo con la obligación de las obras de la ley para los gentiles. La conservación de la ley para los judíos que se hacen cristianos y la posibilidad de comer en la misma mesa, no importando quienes fueran porque ya no hay judío, ni griego, ni hombre, ni mujer, termina declarándolo explícitamente.
Lo interesante es que Pablo siguió siendo judío, enamorado del mesías que era Jesús el Cristo, alcanzando a gentiles proponiéndoles venir a este evangelio, el de ser injertados en el Israel de Dios.
La gran oferta de Pablo está enmarcada en una plataforma ideológica de la diversidad, así como predicará la diversidad de dones para un solo cuerpo o corporeidad de la fe.
Lo atractivo de esta propuesta es que representa lo que ya dijimos, un Pablo otorgando documentos de residencia, pasaportes con nacionalidad, de ser un israelita heredero de las promesas de Dios, sin que le cueste absolutamente nada.
A estos pueblos gentiles provenientes de las religiones mistéricas que cobraban muchísimo para recibir bendiciones espirituales, del gnosticismo del Pléroma algunos otros pueblos, obligados a complacer a los eones y ángeles intermediarios. Ahora encontramos a un Pablo aglutinando toda esta diversidad, los mistéricos, los de la filosofía estoica, epicúrea, el gnosticismo hebraico de raíces persas, un mundo cuya economía circulaba con fuerza a través de todo el mediterráneo y de otras vías trazadas por los romanos , constructores de infraestructura por donde fluía el otro capital, el filosófico religioso del helenismo y las creencias persas, mesopotámicas y universalistas.
A toda esta diversidad Pablo les presenta una puerta, esta es el ingreso a una promesa poderosa, histórica y trascendental que sólo exige aceptar a Cristo, que es el Pléroma, que es el misterio que buscaban los mistéricos y que es el salvador preexistente y la luz buscada por toda la tradición gnosticista en general.
Cuál es la lección. No se ignoró el fenómeno. Pablo asume la conflictividad y la ataca en dos frentes, respondiendo a sus oponentes con trabajo, basta ver sus viajes, él se defiende pero su argumento más fuerte es el resultado de su trabajo.
Y por otro lado su respuesta a brindar una alternativa aglutinante en donde todos puedan ser atraídos sin que les cueste mucho. Pero justificados por una teología que les permitiera tener la seguridad de que sus pasos estaban bien dados, una teoría convincente. No se dan pasos, sin sentir que los mismos están basados en cosas verdaderas y eso Pablo no lo pierde de vista en ningún momento, aprovechando sus cartas para vaciar en ellas esos fundamentos sotereológicos.
En la actualidad frente a la diversidad, el cristianismo si desea ser una respuesta consistente, deberá ir a Pablo y volverlo a leer, hermenéutica en una sola palabra, para este momento histórico heredero de la cosmovisión judeo cristiana que acompaña a toda la red de aparatos socio religiosos y sociales.
Quiénes son hoy los gentiles hoy en día , aquellos que no son paganos, seculares, buscadores de espíritus, ideologías, cinesiologías psicosociales , los adoradores y fanáticos de la religión del deporte, del sexo, del juego, de las drogas, los llamados pecadores. El llamarlos a la conversión, entendida esta como la afiliación al estilo de los prosélitos del judaísmo, que tendrían que pagar ese precio, dejar el placer de su propia preferencia, de sus propias alternativas, de su sistema, es un intento que ha tenido sus buenos resultados hasta que el ser humano, ponga resistencia a las creencias heredas y legitime por la vía de la creación de una nueva conciencia, un nuevo sistema de valorar las cosas. Y eso es lo que está ocurriendo. Convencer a un joven de que no tenga relaciones sexuales sino hasta el matrimonio, nos fue fácil hasta hace unos cuantos años, la lucha hoy es bien ardua para lograrlo y lo peor del asunto han aprendido a transgredir sin rebelarse institucionalmente sino desde closet cerrado. Los desafiantes del closet abierto aumentan de forma desproporcional. Lo alarmante de todo este fenómeno diverso es que va actuando dialécticamente y como tal buscará su expresión en el mundo conocido, y como mundo conocido implica cristianismo nos acercamos aceleradamente hacia muchas respuestas desde los cristianismos oficiales pero a varias síntesis frente a la diversidad convertida en ideología del poder.
Los trabajadores de la conciencia y del servicio espiritual tenemos una tarea tan difícil que nos hacen pensar con preocupación, aunque notamos que las posturas más rígidas, no advierten que sus estructuras se verán profundamente conmovidas quizá de aquí a mucho, unos veinte o treinta años.
Pablo fue un visionario, mientras Pedro y la escuela judaica a la vanguardia de Santiago o Jacobo hermano de Jesús y el posterior movimiento ebionita perdido en el tradicionalismo quedó atrás, no se menciona para nada, excepto en historias provenientes de leyendas de la tradición que no son dignas de mucho crédito por la historiográfica científica. Pero Pablo es plato aparte, como dicen por estos sitios, ese Pablo fue un gran mercader de su producto, sin dejar de ser él, sin dejar de ser él, sino todo lo contrario siendo el cómo era, con toda y esa dificultad de carácter que tenía porque realmente tuvo muchos conflictos internos, con un tal aguijón o perturbación mental que lo atormentaba, tuvo conflictos quizá con su esposa ya que posiblemente era casado al ser miembro de sanedrín, problemas con los apóstoles tradicionales, problemas con su compañero de trabajo Bernabé y Juan Marcos, queremos decir que con toda esa problemática, pudo poner su producto, su evangelio, utilizando las redes sociales del imperio romano, y adentrarse en el corazón del problema, la diversidad del imperio, en todas sus colonias, lo multicultural del ambiente y todo el ambiente político, las estructuras del derecho romano y la filosofía griega como caldo de cultivo para toda siembra doctrinal, en ese marco plantó la semilla de un cristianismo inexistente hasta el momento, ya que Jesús no predicó ninguna cristología y los apóstoles no lograron entender el gran mercado de la diversidad. Pablo es la estrella de esa predicación. Por supuesto Pablo, no alguno de sus discípulos, ni algunas de sus ideas que lo trascendieron y hasta cierto punto lo deformaron. Quiero decir el Pablo que no señaló a la mujer como incapaz de ejercer un ministerio, sino el que se hizo rodear de ellas y de las cuales nombró como a Junias, de apóstol como cualquier otro varón, el Pablo no hostil sino que se presentó en algunos momentos bajo el ropaje de lo mejor del corazón femenino, presentándose como una madre para sus hijos, sus ovejas y seguidores.

Y quiénes los judíos actuales, los religiosos oficiales, las jerarquías fundamentalistas del mundo católico, evangélico, anglicano, ortodoxo y demás oficialidades que han marcado el mundo político e institucional de una nación.
Y cuál sería la postura neo cristiana paulina abierta a la diversidad. Ese es ensayo que está por verse.
Unos exigirán a los gentiles circuncidarse, es decir someterse a todos los dogmas.
Otros se abrirán a la gentilidad creciente para lograr adeptos para engordar sus membresías y sus bolsillos.
Otros crearán una teología susceptible a los intereses de las O.N.G interesadas en financiar estas agendas de la diversidad.
Pero quiénes serán los auténticamente paulinos. Pablo era un personaje muy independiente, como es el carácter del místico y del profeta, no sometido a O.N.G. alguna, no admitió la presión de los jerarcas de Jerusalén, no se dejó someter sin antes alegar que era ciudadano romano y como tal debía ser juzgado con esas prerrogativas, no renegó de su judaísmo , no se arrodilló frente a las autoridades del saduceísmo ni del fariseísmo al cual pertenecía pero asumió el reto de responder a la diversidad y salió siendo un ganador y pos ganador, ya que todos sus seguidores incluyendo a los evangelistas influenciados por su doctrina, los que escribieron los cuatro evangelios posteriores a sus cartas y hasta el apocalipsis de Juan el presbítero, el Patmos , un cristiano del paulinismo.
Con ese carácter cómo se construirá la nueva fase, los nuevos cristianismos como dirían algunos teólogos del seminario de Jesús de la modernidad. Esta es una pregunta abierta a la reflexión y sobre todo a la creatividad.
El problema todavía no es una pandemia, pero en unos cuantos años lo será. Estará preparada la iglesia y el cristianismo para hacerle frente, o ganará la partida el cristianismo de las O.N.G, será ese el futuro, pregunta un joven teólogo acabado de ingresar en el seminario para llegar a ser un ministro del futuro.

miércoles, 21 de mayo de 2014

Unidad dentro de la diversidad (in varietate concordia)

(In varietate concordia)

La unidad dentro de la diversidad como plegaria es válida, como realidad es solo una utopía, aunque sí puede operar transitoriamente en el mundo de las burbujas de la apariencia. Aparentemente el P.L.N tico está unido. Entonces por qué perdió. Aparentemente el P.L.D dominicano está muy unido, claro por la lucha y descomposición del gran P.R.D. pero cuánto durará esa gran unidad. Posiblemente unas cuantas décadas más, dado el carácter de logia secreta que heredó y el leonelismo que lo supo convertir en un producto popular. Pero tarde o temprano no habrá unidad. La unidad es transitoria, es la zanahoria tras la cual corre el burro y cree tener cuando la alcance, sólo que la vida le pedirá que vuelva a correr hacia otra a ver si logra unidad entre lo orgánico sensible y lo no sensible necesario. Entre el animal y su comida vegetal.

Diversidad y Unidad se dan dentro de cada uno de los universos en contradicción, pero entre los dos polos no puede haberlo hasta no producirse una complementación o síntesis en el proceso.

Un grupo se ve unido mientras tenga un opuesto con el confrontarse.

Me referiré a dos mundos religiosos llamados ambos cristianos, el catolicismo y el protestantismo. No les llamo como debería ser nominado, o sea, catolicismos y protestantismos. Pero esa sería otra temática demasiado dificil de analizar para nuestra limitada capacidad. Eso se lo dejo a intelectuales como Ronald Obaldía González o Eliud Ecarnación, Miguel Fernández, o Bart D. Ehrman.

 El catolicismo se sintió unido en las luchas contra los llamados herejes, contra el protestantismo posterior. Pero, frente a sus luchas internas, prefirió hacer uso por una parte de la nueva inquisición y por la otra moderar la situación mediante el concepto unidad en la diversidad, tan usado por los creyentes posconciliares, desde el vaticano II hasta nuestros días. De allí hasta acá el mismo catolicismo ha tenido una depresión anímica progresiva que ha tratado de aliviar y se ha refugiado en tratar de mantener su status quo en una sociedad donde no se vislumbra un enemigo definido contra esta institución. Lo que da como resultado un fortalecimiento de una aparente unidad que no busca la diversidad, ni atacar las diferencias de forma tan violenta, sino la tolerancia constipada. Tenemos una iglesia católica, conservadora en general, estratégicamente silenciosa y tolerante frente a la competencia social emergente pero intransigente en sus entrañas. No obstante, los grupos internos que aspiran por cambios profundos y abrirse a los nuevos tiempos de teologización de lo diverso, está allí, a la espera de nuevas oportunidades y soñando con un nuevo Vaticano II que sería versión III, pero pensado ya como las versiones de los nuevos celulares, en un nuevo catolicismo light, erótico, emotivo y de multicolores, mientras el conservadurismo se mantiene, oscilando entre una teología aparentemente encarcelada, analógicamente a Ratzinger, y un misticismo social franciscanista, ejercido por un jesuita que llega a Papa, mitad Italia, mitad América Latina y que tiende a llenar el vacío dejado por la santa de Calcuta y el recuerdo dinámico de J.P.II., militante mundial del anticomunismo, pero con la devoción partida entre el santo canonizado del Opus Dei, el monseñor Escriba, y el nuevo camarín dedicado a Wojtyła
Eso es sólo una aproximación mediante un ejemplo discutible. Cuál unidad y cuál diversidad. Es sólo una espera de que la olla de grillos comience su griterío desde que las fuerzas internas ocultas en la política interna explote y el detonador no viene de dentro sino de fuera. Fue la amenaza del comunismo lo que motivo a esta iglesia a buscar respuestas para atacar o montarse en el nuevo carro profetizado. Al final, prevaleció la lógica del capitalismo y la iglesia volvió a reorganizar sus fuerzas por la vía de la intelectualidad, la asimilación estratégica de sus cuadros más revolucionarios, la de la obra social y el ensayo de nuevos papas, hasta desembocar en el Francisco franciscano-jesuita, tierno y populista.

La unidad en la diversidad en el mundo protestante es otro ejemplo. El protestantismo en cuanto tal  nunca ha estado unido, excepto en sus inicios frente a la persecución católica. Son precisamente las persecuciones las que producen unidades, las cuales sirven para ocultar las posibles luchas intestinas. Es una cualidad de la materia en cualquiera de sus niveles, permanente lucha, permanente síntesis, dialéctico camino hacia un punto o hacia nada. Prefiero creer que hacia un punto Omega. Cada grupo está unido y no se sabe cuando comenzará la división. Algunos grupos se han mantenido unidos. Pero básicamente dos polos, el liberal y el conservador avanzan hacia una división irremediable. Sus diferencias estuvieron ocultas, mediatizadas, a través de un trato medio hipócrita todos de alguna forma se dieron sus manos y amén, gloria a Dios sobre todo cuando pasó el peligro mundial del comunismo. Los grupos liberales fueron instrumentos de la teología de la liberación y los conservadores del fundamentalismo americano, todos recordábamos como los izquierdistas cada vez que veían un misionero norteamericano lo acusaban de ser agente de la CIA y tal v el este pobre hombre había vendido todos sus bienes y estaba predicando el evangelio de forma romántica, a lo mejor controlado por la CIA pero sin saberlo. Especulación mía por supuesto.
Terminó la guerra fría, los dos grupos siguieron divididos pero sin manifestar mucha fobia externa. Se intentaron acercamientos interdenominacionales en los que se veían de vez en cuando bautistas conservadores compartiendo con evangélicos de la nueva izquierda, todo parecía estar bien. Diversidad en la Unidad. Pero de fuera aparece en el mundo protestante liberal los primeros pastores bendiciendo uniones de personas del mismo sexo.  Se publicó la declaración del obispo episcopal Robinson presentando a su cónyuge, iglesias metodistas liberales abriendo el ministerio a hombres y mujeres de closet abierto. Y explota la bomba que hace que los conservadores, aun con sus historias de escándalos morales, producto de las acusaciones internas de los tele evangelistas, Swagart y demás, aún repetimos con esas historias oscuras, comienzan a levantar sus sermones contra esta nueva situación. La diversidad ya no el comunismo es el agente que dispara el aceleramiento de esta vieja contradicción del mundo religioso protestante. Ya no las viejas luchas de conservadores fundamentales exégetas y hermeneutas defensores de los considerados mitos intocables de la Biblia, contra las escuelas de la Alta Crítica con sus herederos de las hipótesis documentarias, al fin y al cabo esto solo lo entendían las élites de las ciencias bíblicas.

Las crisis se convierten en verdaderas cuando toman cuerpo social, es decir , cuando hay masas dispuestas a tomar bandera, cuando hay instancias polacas protectoras, cuando hay agendas definidas por parte de los dueños del gran supermercado mundial. Recordemos que fueron príncipes alemanes los que protegieron a Lutero de la persecución política.

Hoy la política trazada desde  los centros metrópolis del poder han dado su aval a la diversidad. Y nuevamente se resucita la letanía de la "  In varietate concordia" Pero al mismo tiempo se radicalizan los polos. Los evangélicos internamente, los católicos internamente también y brota un posible ecumenismo de circunstancia entre los protestantes conservadores unidos a los católicos anti diversidad. Los católicos liberales de la diversidad con los protestantes que simpatizan y promueven dicha agenda.

Pretendemos llamar la atención que es la "doctrina" y "bandera" de la diversidad el estímulo para este ecumenismo de circunstancia. Será una real unidad en la diversidad o los síntomas de un nuevo cristianismo bicéfalo. Ya no incitado por el gnosticismo del siglo II y las consecuentes luchas cristológicas del siglo III, sino por la "herejía" de la doctrina de las diversidades.

Un catolicismo más fundamentalista no anti protestante fundamentalista. Y un catolicismo alternativo, de corte siempre episcopal pero no antagónico al protestantismo liberal. .

Quién ganará esta batalla. Dice Bart D. Erman en Cristianismos  perdidos, que  los llamados proto-ortodoxos ganaron en el pasado y conformaron la unidad del dogma católico, de lo contrario nuestros pueblos serían arrianos  como lo fueron muchos pueblos del imperio. Pero, por fin ganaron los protoortodoxos o sea el catolicismo romano, hasta sufrir el golpe más fuerte en el siglo XVI con la Reforma Protestante.

El gnosticismo, las cristologías docetas, las llamadas herejías fueron temas que llegaron a las masas y a grupos de poder. El  catolicismo del siglo IV y V cuyos orígenes fueron minoritarios y perseguidos, ahora estaba en el poder y desde el poder podía usar su propaganda paulinista en su sustancia y contar también con la mayoría de las masas. Se quemaron documentos, gentes, organizaciones y se logró aparentemente la unidad.

La oscura Edad Media trajo síntomas de división, calificadas de brujería, la cual fue
aplastada y siguió la aparente unidad , pero en la historia siempre existirán los Giordano Bruno y los Galileos poniendo en crisis al establecimiento. Siempre el desarrollo humano utilizará sus agentes para estimular la zozobra.

Quién ganará es nuestra pregunta y responderla desde esta situación mundial y global es difícil. El concepto hermenéutico más útil hoy lo resume la palabra reciclaje, como se hace con la basura clasificada.

Veremos en las estanterías , hasta en iglesias nuevas versiones de la Biblia. No la vieja vulgata latina de Jerónimo tal útil para un catolicismo tridentino, ni la versión del rey tan propia para aquella moral epocal, ni de de Jerusalén más exegética e inteligente en sus traducciones para un nuevo mundo posconciliar, ni la Reina Valera tan amada por el mundo evangélico tradicional, ni siquiera la versión ecuménica con los deuterocanónicos adjuntos al lado del Nuevo Testamento Dios llega al hombre, de corte ecuménico propio de los finales de los sesenta y comienzo de los setenta ni la versión primera de la famosa Biblia Latinoamericana que coqueteaba con los Gutiérrez, Asmann y demás profetas de la teología de la teología de la liberación, ni otras de padrinaje calvinista o pentecostal. Veremos repito, nuevas versiones como ya hay una por ahí, con tendencias feministas donde a Dios se le llamará mamá o ella, o nada, para dejar atrás el patriarcalismo propio de la cultura bíblica hebrea. Textos donde la alternativa será un hecho y la diversidad un fondo ideológico de sustrato. Eso estamos seguros ya se está elaborando hasta los extremos de que podría surgir La Nueva Biblia Gay, o cosas así.  En todos los idiomas y dialectos hasta llegar a pueblos pobres que no tienen los recursos para adquirir un libro, se les regalará traducido hasta en el creole que habla el pueblo  haitiano, tan patriarcal y subdesarrollado.
Sin duda la diversidad por encima de su alejamiento a la ortodoxia, aún siendo herético o considerado satánico, producirán cambios significativos en la historia que obligarán a todo el sistema a ponerse en una crisis que pueda permitirle revisarse a sí mismos.
 

Los católicos y protestantes que  apoyan la diversidad no han revisado sus propias crisis como grupos religiosos que caminan hacia la extinción, dado que sus membresías van disminuyendo hasta encontrar templos en los Estados Unidos y en Europa que sólo son recuerdos del pasado y en el mejor de los casos edificios que se le alquilan a los cristianos proselitistas, cuyas liturgias distan completamente de las tradiciones.  Entrar a un templo luterano y escuchar un griterío pentecostal es algo que abunda en los Estados Unidos.

Los católicos y protestantes que no apoyan la diversidad  también deberían revisar su consistencia moral, los desprestigios en el campo político, sus desaciertos en el manejo financiero, sus manipulaciones en función de las exigencias de una sociedad de mercado,

Ir a la guerra ideológica con estas cargas no resueltas serán elementos posiblemente en contra para saber quién ganará en esta lucha.
Creemos que en un mundo posmoderno con grandes contradicciones,  un cristianismo moderno, ecuménico en cuanto a la diversidad, emotivo, abierto a las hermenéuticas bíblicas subjetivas, político y con gente ostentando puestos en la polis, simpatizante de algunas ideas de izquierda, abierto a lo carismático, a lo profético, apostólico y a lo litúrgico étnico. Quizá un cristianismos con dos tendencia dentro de su unidad. Una  tendencia más neo- pentecostal   abierta a lo diverso  y del otro lado un catolicismo más sincrético con las religiones indígenas, con el chamanismo, con una teología alternativa y diversa, carismático y político a la vez.
Esas dos cosas, más o menos, creemos que serán los resultados en cuanto a lo religioso, estimulado por agentes casi inesperados esos cisnes negros de los que brillantemente habla  Nassim Nicholas Taleb en su magistral obra llamada así, Cisne Negro, refiriéndose a esos eventos que en un momento surgen fruto de circunstancias, acumulación y aleatoriedad e impactan como meteoritos inesperados para bien o para mal.
Se avecina un cristianismo que camina hacia cambios muy radicales.
Pero continuará en las catacumbas un cristianismo que no querrá entrar en la danza del  tiempo actual. Su futuro es incierto, pero también allí podrían ocurrir Cisnes Negros.
Resumiendo la resumido. La llamada Unidad en la diversidad es una idea hermosa, atractiva, pero creemos que es una ideología más con que la que la dialéctica de la historia, con sus leyes y su aleatoriedad nos conducen hacia paradigmas desconocidos.
El único que sabe realmente qué pasará es Dios, inteligente creador y en el hay unidad en la diversidad, la Trinidad, según la doctrina que heredamos de la  protoortodoxos ganadora.  Será que en Dios es el único sitio donde se pueda encontrar realizada esta ilusión histórica, uno y a la vez tres.  Será que esa doctrina es la más apropiada para esperar de El, la unidad que limpie toda cosa que no permita ingresar la verdadera diversidad.  Dice el apóstol Pablo que en Cristo se termina  la diversidad, del judío, del griego, del hombre y de la mujer.  Será que esto sólo se verá realizado en el cielo, en el futuro, en  el nuevo cielo y la nueva tierra.
Por ahora en este momento de nuestra historia  creemos que la unidad es solo transitoria e ilusoria y caminamos hacia una ideología aglutinante llamada diversidad, ojalá que no se convierta en una creencia y en una religión dominante que termine persiguiendo a todos los que no creen en ella, como ha pasado repetidas veces en la historia humana

martes, 20 de mayo de 2014

La necesidad es el motor de la historia


Si ud. necesita realmente algo trata de adquirirlo, para lo cual deberá pagar un precio. Pienso en qué necesidad tiene un pueblo de realizar un cambio de gobernantes, de partido en el poder, de nuevas figuras que le den nuevas esperanzas y evidencias de recibir lo que se necesita.
La espectativa de lo que se oferta, más la sensación de ponerlo en las manos del cliente y el manejo de las futuras decepciones, tales, en calidad de nuevos nichos para otras ofertas, constituye un juego de variables dialécticas en que estamos sumidos en esta sociedad posmoderna, con productos igualmente posmodernos y necesidades que van desde lo primitivo en ciertas zonas marginales hasta los absurdos de las élites de las metrólis del supermundo de los dueños de la prosperidad.
Dos ejemplos que tengo frente a mi en este momento, uno en un artículo pendiente de lectura y otro en la televisión que está pasando un Maratón de una empresa religiosa evangélica ansiosa de obtener muchos recursos económicos, moviendo a las gentes a ofendar y prometiéndoles asimismo soluciones inmediatas a problemas tan complejos como la adicción de sus hijos, basados en una propia hermenéutica inmediatista de relatos en donde Jesús libera a un muchacho endemoniado.
La dialéctica compuesta por la necesidad, mercado, en este caso del programa televisivo religiioso que tengo en mis narices, y la operación chamánica que no es nueva, solo que ha tomado una modalidad, ofertar por la vía de un neoevanbelicalismo mágico, o de una nueva era sincretista lo que sólo se obtendría en el mejor de los casos, como alivio terapéutico , o como una solución realmente milagrosa de Dios, en la que creemos y no descartamos o por la vía de la ciencia, tanto la real, como lo es la medicina y la psiquiatría moderna o como por la ciencia ficción del engaño de los gurúes de la nueva ola o de caer en las ofertas tan poco creíbles para volver al círculo de la relación consumidores, consumadores y consumidos. Los primeros, todos nosotros, los segundos aquellos que amasan grandes fortunas comprometidas con la ansiedade de la sobrevivencia de las compañías modernas, que un día están y mañanan pueden ser abatidas por la competencia y los terceros, la cantidad de desechos que van quedando y que caminan como objeto también de consumo hacia los cementerios que hoy en día también se presentan como paraísos de campo santos, incineraciones místicas y cofres de cenizas mistericas. Es decir en la utopía de una sociedad que camina hacia una burbuja ilusoria e ilusionada donde las ideologías perdieron su fuerza o se transmutaron hacia una nueva religiosad con sus contradicciones internas en cada polo y con la polarización expresada por ejemplo en la dicotomía religión de la diversidad y fundamentalismos en el otro exremo.
Es decir las necesidades ya no son vistas en la Pirámide de Maslow, donde se establece una jerarquía, sino como un síndrome cuasi diabólico donde todo el mundo se declara necesitado de todo, hasta del último modelo de celular, la última fórmula del superorgasmo hindú o la efectividad de una determinada rama chamánica sea primitiva o con maquillaje evangélico. Un Max Weber agotaría su propuesta de racionalidad para el entendimiento de los rumbos de esta economía loca, chamánica y consumista que se expresa en diferentes discursos de lateralidades diversas. Sirva de ejemplo el discurso de traiga una ofrenda y verá a su hijo liberado de demonios hasta el de iza la bandera de la diversidad y serás salvo tu y tu casa.
La pirámide de Maslow y el enfoque de Weber quedan reducidos a aportes referenciales para poder entender este pandemonion posmoderno.
A dónde se irá a parar en este alocado proceso sin claras referencias como sí las hubo en el siglo XIX y eran esbozadas con mayor precisión en el XX. O mejor dicho, en dónde estamos. Frente a un televisor que me oferta la diversidad del discurso diverso en una sociedad que se abre paso desde frentes fortalecidos como lo es la nueva neurociencia y que se debilita frente a a la ausencia de una religión que resista el peso de la historia y que ensaya como ideología desgarrada , intentos de casar por así decirlo, a un Marx gay con un Jesús luciendo los símbolos de la prosperidad, por supuesto no al Jesús histórico sino al de la nueva cristología de la plasticina epocal, con matices de cantante de música urbana, en la nueva liturgia de la falta de profundidad en la metafora de una sociedad antiintelectual que ostentga el poder. El cual está en manos de tecnógratas y no de filósofos, teólogos ni científicos.
Así que veo este programa de cristianismo descaradamente mercantil sabiendo que es parte integrante de un concierto de productos para un sinnuero de necesidades que vez más inducidas y cada vez más dificiles de satisfacer. Simplifico diciendo que se trata de una sociedad que promueve un modelo físico de belleza esbelto y al mismo tiempo te exige ingerir toda la chatarra posible para ponerte obese. Es decir una sociedad que te mete en el problema y te oferta una religión o una alternativa de ideología de la diversidad para resolvertelo. Magia pura magia y aún la magia dirían los marxólogos de mi época, son economía pura economía. La racionalización en Weber y el mecanicismo económico en Marx no estarían lejos de ser instrumentos mezclaves, como herramientas hermenéuticas para decifrar en sus raices esta endiablada sociedad que hemos creado.
Lo aleatorio de un Cisne Negro nos está sorprendiendo y podría emerger de lo mejor de la ciencia, de la historia y de un regreso al entendimiento de un Jesús histórico y no el de las cristologías de los nuevo McDonald del siglo XXI. Pero ese es tema para otro momento.
Resumiendo lo resumido: Las necesidades humanas siguen siendo el caballo de batalla no solo en la sobrevivencia sino en la guerra del hombre contra el hombre, caballo como el de Troya, ideológico, aglutinante, decorativo, erótico, psicoevangélico, alternativo, diverso sí porque esconde una religión violenta en sus entrañas, que es la guerra de los opresores contra los oprimidos, donde ya no es el imperialista contra el obrero, sino la tecnodependencia bulimica contra el alma anorexica en el corazón de una socidad de transición pero sin aparente futuro. El futuro ya ni siquiera es Orange sino las alianzas estratégicas de las transnacionales con otras , para saber quién consume más al consumidor, candidato a ser consumido, porque no importa cuántos mueren sino en cuántos más consumidores sean creados. Cómo compaginar esto con un desprecio hacia la vida, un culto a abortar no solo niños sino a la historia misma y una afiliación insensata hacia una planificación familiar sólo basada en la filosofía de ser menos para consumir más. Esta profunda contradicción nos hace ver que somos una sociedad que camina irremediablemente hacia la muerte, claro está, de forma diversa.
Lo otro que tengo entre mis manos es un artículo que se llama quién es caperucita roja, no será dice el autor, el mismo lobo en su metáfora inocente. Con esta inquietud dejo a los intelectuales que les gusta pensar como Eliud Encarnación Segura.
-Rodrigo DB

La agenda de la diversidad



Por encima de si se está de acuerdo o no con la diversidad, la gran pregunta de fondo es sobre el sentido que tiene esta agenda. Porque hay tanto interés desde los centros de poder para promoverla y hasta imponerla.

Por una parte, esta agenda debilita cualquier pretención de lucha violenta por razones de índole social al estilo del comunismo del pasado. O sea, mediatiza a las emergentes izquierdas novedosas y buscadoras de un espacio para la vieja utopía de la sociedad basada en la dictadura del proletariado como paso previo al reino social del estado comunista. Hoy los izquierdistas que gobiernan en América Latina, saben que no será posible un estado viable sin el ingrediente de una lucha de moda, por la diversidad. El retrato del Che, es transformado bajo el maquillaje de un ser no tan masculino, ni tan macho, sino por uno con gorra de colores, los del arcoiris.

Por otro lado, la necesidad de un estado laico, pero sutilmente sacralizado hace que la nuevo religión sea propicia a la diversidad, lo cual lleva a transformar de forma electrónica los cantos gregorianos. En otras palabras, la escogencia de un obispo protestante pro diversidad como funcionario de un posible gobierno alternativo es una señal de la búsqueda de un nuevo chamanismo religioso, que haga posible la magia de convertir lo laical estatal en sacro laical. La nueva religión no requiere de la tradicional moral judeocristiana de una sociedad con canas victorianas sino con canas quizá neoluteranas, neomarxistas, neohipistas, anti facistas y contrapartida de la vieja y pesada doctrina social de la iglesia. Ya Rerum Novarum puede cantar un Requiescat in pace, junto al tradicionalismo clerical cada vez más decadente. Es antidiverso.

La aparición de un embajador norteamericano sin esposa sino con esposo. La aparición de un ministro de turismo con su pareja varón y no con esposa, no son solo temas de escándolo moral,, esto ya no preocupa más que al conservadurismo y fundamentalismo ético y religioso, lo que sí es también, una manifestación de poder de esta enorme agenda de la diversidad.

El punto de explicación, la clave hermenéutica, no es tan facil de descubrir, porque se trata de un fenómeno no complicado sino complejo. Es decir que forma parte de un tinglado cuyas claves son sujeto de un análisis propio de los discípulos de Gadamer. Algo que requiere lectura y reelecturas de diversos ángulos. Pero, simplificando, cosa atrevida, podríamos intentar la hipótesis de que se trata de un asunto de mercado, poder y economía. La diversidad cogió cuerpo y su cuerpo es fuerte, por ende no solo es producto del sistema, del capitalismo dirían los ortodoxos de la sociología marxista, sino que se ha convertido en un paladín necesario para la misma reproducción y sobrevivencia del sistema. Todos los productos están teñidos de diversidad, el derecho por supuesto no el canónico, sino el social de los estados modernos sienten los dolores de parto produciendo leyes de la diversidad, nuevos contratos de relaciones matrimoniales nunca imaginadas, no solo humanas, sino las atrevidas fantasías de la literatura proponiendo matrimonios con animales, con mascotas sujetas a recibir herencia de sus enamorados dueños o amos.

La agenda de la diversidad también es diversa. Desde un pastor protestante que defiende la diversidad étnica pero no la sexual, hasta la de los grupos racistas que reniegan a ser sexistas pero se creen superiores por su color. Un hombre gay denunció por ejemplo, un bar en donde solo podían ingresar gay que no fueran negros, ni latinos, ni pobres. La discriminación no solo es evidente, existen iglesias modernas donde se ofrenda o diezma por medio de un veryfone, cómo se sentirá alguien que no maneje esa tecnología, pues excluido.

La conclusión del proceso dialéctico, siguiendo de forma mecánica a Hegel, sería creer que las diferencias entre los mismos diversos, los llevará a una negociación igualmente diversa. Esto sería un nuevo contrato social que nunca imaginó Jean-Jacques Rousseau, pero sí los visionarios de Hollywood pensando en nuevos y extraños argumentos cinematográficos.

En síntesis estamos frente a una nueva sociedad cuya religión secular o secularización sacralizada, es en el fondo la diversidad, principal producto de un mercado que simboliza su economía y su capital, siguiendo a Marx en la definición, pero que a la vez es tan diverso en sus fuentes que va desde los viejos modos de produción ahora globalizados, hasta los llamados capitales o riquezas golondrinas, lavadas en los lavaderos de las alternativas políticas, sociales y hasta religiosas-

En fin, la diversidad tiene que ver más con política económica, como también el negocio de la guerra, que con la causa misma o las causas que desea defender.

No todo lo que brilla es oro, ni toda bandera de colores implica verdadera diversidad, tal vez solo sean símbolos de nuevas contradicciones convertida en arcoiris y los tales , los arcoiris no son más que agua vista a través de la luz de la ilusión.
Rodrigo DB

ENTROPIA Y DIVERSIDAD O LA DIVERSIDAD DE LA ENTROPIA EN LA ACTUAL SOCIEDAD LOCA



Entropía es una palabra griega (ἐντροπία) referida al concepto evolución, transformación, cambio, movimiento. En el mundo de la física y del estudio de los procesos del universo, se maximiza la energía y esto es un fenómeno entrópico, de manera que, cuando los elementos aleatorios se acercan al equilibrio, lo hacen de forma entrópica, es decir como le conviene al sostenimiento del sistema en cuestión. Cuando Clasius definió en la entropía, la parte de la energía libre, independiente de un sistema, volátil y aventurera, nos acercamos a la posibilidad de utilizar este término en procesos de tipo social. Una liberación de un elemento que podría ser agente de muchas otras reacciones. Bolzmann agrega, invento yo, a favor de nuestra reflexión de hoy, apuntando hacia el poder del desorden. El poder entrópico de la energía, en términos sociales, los movimientos aleatorios que surgen del engranaje activo de todo el sistema. En estos días hemos estado hablando del fenómeno de la diversidad, pero desde el 2010 se estuvo observando las reacciones de las redes sociales y su influencia en el poder social, como las primaveras arábicas o revoluciones democráticas. Naam Chomsky aparece como profeta o interprete que le da re-electura a esos fenómenos que según él surgen desde el 2010, pero sus raíces etiológicos arrancan en el caldo de cultiva de una gran descomposición social, injusticia, falta de respeto a los derechos humanos, podredumbre que surge de las grandes desigualdades y corrupciones de los que ostentan el poder y de los que reproducen lo mismo, abajo, es decir en sus relaciones familiares, opresión del macho sobre la hembra, maltrato y abuso infantil del mismo hogar paterno y locura colectiva modificada por la vía de una causa, encausada valga la cuasi repetición, por los nuevos sistemas globales de comunicación, comandados por la internet, la nueva carretera de entropías que buscan una estructura de funcionamiento en las protestas pacíficas en este caso. Pero cómo será la situación en nuestros países caribeños y latinoamericanos. Siempre tengo en mente mientras escribo, a Costa Rica, por ser mi útero existencial y a la República Dominica por ser mi paraíso de realización. Aparte de esa nota subjetiva personal que me otorgué la libertad de compartir, nos preocupa en ambos países y en los que representan nuestra región, los fenómenos entrópicos que nos gustaría analizar pero apenas alcanzamos verle la cola y especular hipotéticamente sobre la misma.
La entropía que toma forma religiosa, ese es nuestro campo donde podríamos decir algunas palabras aproximativas para que los politólogos, famosos con don Ronald Obaldía puedan agregarnos los enfoques de su especialidad y ayudarnos a ver las cosas más en claro, es decir menos entrópica. Desde los comienzos de la cultura de occidente, vive dentro de su gnoseología cultural el materialismo de Epicuro –que conocemos desembocando en la física de hoy, tal como aparece en el Sueño de una teoría final de Steven Winberg .
La búsqueda de la unidad y la armonía es la base física y filosófica entrañada en todo el proceso de nuestra historia. Toda cultura, donde se ha expresado la función cerebral del homosapiens, con sus lóbulos prefrontales activos, ha tratado de buscar esa homeostasis de unidad y armonía, consigo mismo, con lo mistérico, con la naturaleza y con la horizontalidad relacional de sus homólogos, ser humanos estructurados por sistemas creados para garantizar, supuesta o realmente, el orden de la unidad y armonía. Este impulso es detectado desde la historia de la física.

Desde el romanticismo alemán, “los fenómenos magnéticos, eléctricos, químicos y hasta orgánicos ,deberían estar entrelazados formando una gran asociación... [la cual] abarca toda la naturaleza” Schelling pasando por el idealismo de la búsqueda de una Weltanschauung de soporto armónico hasta la concepción en la ciencia fría, en la física, dela Escuela Escocesa del Sentido Común de hace varios siglos, se va produciendo un vínculo entre propuesta de referente, sea religiosa, política o social y la confirmación a través del sentido común.
Entropía y sentido común, no siempre bailan juntos en nuestras sociedades. El sentido común va dirigido a la búsqueda de consenso y los consensos no siempre son justos pero representan lo aceptable. El paso de lo inaceptable rompiendo el himen del sentido común, produce las entropías que desarrollaran cadenas de nuevas reacciones y esto se hace incontrolable e impredecible. Es allí donde se requiere la religión, elemento de religare no solo con lo desconocido y mistérico sino con la valoración de las acciones y la celebración simbólica litúrgica de la vida misma. Hoy la entropía de la diversidad como religión social sin una teología con suficiente mistificación y mitificación, se está imponiendo por la vía de los caminos democráticos siendo la vanguardia de una nueva primavera, en nuestro caso verano, no árabe sino latino caribeño. Por supuesto que las agendas siguen surgiendo de los núcleos atómicos, o sea desde las metrópolis de poder, en nuestro caso Estados Unidos, y de nuestro caldo de cultivo, pobreza, ignorancia, intolerancia, estando detrás la conceptualización y más que eso naturaleza ontológica, los valores judeocristianos que nos dieron origen como pueblos conquistados, mezclados con nuestro antiguos chamanismos indígenas y africanos. Esa es la revolución actual. Esa es la entropía que estamos respirando. No somos rusos ni nuestro orígenes distan de ser arios, somos latino caribeños buscando un modelo propio y manipulados por los centros rectores del mercado, el nuevo amo de occidente.
Quién se opone a estas nuevas reacciones físico sociales y religiosas, porque en el fondo, son eso, propuestas religadas. Por supuesto que la oposición principal está representada en las viejas religiones, en los nuevos saduceos que controlaban el poder religioso de la Palestina, aún no Palestina pero sí Judea, del tiempo de Jesús. Los sistemas conservadores que no por eso son malos, como tampoco lo fueron los saduceos y fariseos per se, pero en un momento dado ven que las nuevas corrientes, el Jesús tumbando mesas y el zelotismo con la espada mientras los esenios metidos en las cuevas orando, escribiendo y preservando el viejo sacerdocio del cual fueron despojados en la vieja sociedad macabea, todos estos ejemplos juntos, formaron la entropía para la reacción y unificación de la religión, judaísmo oficial y Roma. Traigo eso a colación, para preguntarnos hoy en día, cuáles son las religiones viejas y cuál es la nueva. Pensamos que la nueva propone la diversidad. La vieja se divide entre los tipos de diversidad aceptados. La lucha está echada y la suerte parece favorecer con el tiempo a la entropía de la nueva corriente diversa, lo que un fundamentalista evangelical llamaría la preparación de los tiempos para el gobierno del anticristo.
Dejando el anticristo a un lado, para la escatología y el dispensacionalismo de Darvy, queremos pensar en los resultados de esta lucha de fuerzas dentro de una batalla que pretende no derramar sangre, porque se dan en el fuero interno de cada nación y no como guerra civil ni batalla contra enemigos fronterizos. Es una lucha que toma visos políticos. Y los políticos son eso, políticos y danzan de acuerdo a las conveniencias de cada coyuntura. Exceptuando aquellos comprometidos con rígidas posturas e instituciones fundamentalistas que sacrificarían hasta su pensamiento para ser fieles a la causa por la cual están dispuestos a perecer, sin faltar los oportunistas que saben “nadar y guardar la ropa” al mismo tiempo.

La religión es diversa y la oposición también, pero los unifica la lucha por mantener, negociar o arrebatar ese poder. Toda guerra y toda religión es política.
Por ejemplo la vieja estructura de la iglesia romana se estremece frente a los avances de una filosofía y movimiento de religiosidad secular, llamado diversidad. Esta propone que la mujer oficie el poder de la misa, o sea el poder mistérico de convertir un pan en el mismo Cristo. Eso es inadmisible en el catolicismo actual. Pero en el futuro cómo será la cosa.
Por ejemplo la vieja estructura fundamentalista del evangelicalicalismo reacciona contra los derechos de las minorías sexuales opuestas al modelo de la hermenéutica bíblica protestante fundamentalista. Pero el protestantismo al no ser monolítico presente variables que están abiertas a todos los cambios y a la aceptación de todo tipo de étnica y preferencia incluyendo la sexual. Pero en el futuro cómo serán las cosas.
Los movimientos pentecostales ya respondieron a un sector de la diversidad, a los pobres, dándole tanto a hombres y mujeres, todos los derechos para ejercer todos los ministerios posibles. No nos extrañaría que desde esa misma plataforma surja un pentecostalismo abierto a la diversidad, eminentemente pobre, o sea masivo , que nos sorprenda en el proceso de creaciones de cristianismo de diversas corrientes. En el pasado, en los siglos II Y iii los cristianismos gnósticos, docetistas algunos, marcionistas y demás, fueron absorbidos por un solo cristianismo de origen paulinista y esta corriente, el paulinismo re.leido y reciclado con los filósofos griegos, con Agustín bautizando ideológicamente a Platón, el platonismo con sus conceptos y el arrastre helénico persa, permitió bajo la sombra de los ornamentos del sacerdocio judío y los barrotes del derecho romano, convertido en canónico, dieron esta catolicismo imperante que solo fue conmovido en el siglo XVI por una nueva corriente, que representaba la diversidad en cierto sentido, al proponer desencadenar la Biblia y que cada creyente se adentrara en una interpretación más personal, luego sería más carismática y en cierto sentido más liberal.
Frente a un catolicismo que ya no está preocupado por la inquisición antigua ni por perseguir a los teólogos de la liberación, hoy refugiados en nichos de la diversidad, con un alto descredito, nos referimos al catolicismo acusado de malas prácticas pastorales en contra de individuos y sectores como los menores de edad, surge, decimos, frente a este catolicismo, debilitado y agónico una fuerza social y moral en marcha, como la llamaba Silo, el filósofo de los Andes, ignorado e incomprendido, fuerza que aún estando satanizada con aquello de que son del diablo y no heredarán el reino, han encontrado en otros sacerdotes, en un nuevo saduceísmo fabricado por los nuevos macabeos de los gobiernos izquierdistas modernos, una bendición aunque no papal por lo menos obispal, presbiteral o pastoral. Les están diciendo, muchachos no están solos Dios está con ustedes. Siempre el tema de que lado está Dios. Los fundamentalistas creemos que está de parte de los que afirmamos que la Biblia es la Palabra de Dios. Pero en los procesos sociales no basta con lo que creamos sino en quién asciende al poder y de qué sacerdocio lo avale. Eso lo tenía más o menos claro Constantino en el 312. Sin esos apóstoles no sería posible la sobrevivencia de Roma.
Así está planteada la lucha. Quiénes tendrán más poder. Creemos que los grupos proselitistas que sepan atraerse la simpatía y la membresía de grandes mayorías, tendrá también en estas primaveras democráticas, un poco más de votantes. Pero creemos también que la sustancia ontológica de una sociedad no se suicida fácilmente y la mayoría católica seguirá siendo mayoría pero no tan dócil a su religión como antes. Fueron católicos nominales en su gran mayoría los que votaron en Costa Rica, en elecciones ejemplares, libres y transparente, por un señor que representa la diversidad y la nueva izquierda a lo tico.
En ese ejemplo anterior nos atrevemos a pensar que las posibilidades que ganen los alternativos tendrán que ser avaladas por un neocatolismo quizá luterano y por un neopentecostalismo abierto a todo por razón de ganar a todos, en el gran mercado que lo representa de manera expresa las estrategias de un canal televisivo como lo es Enlace, que está según dicen ellos, conectado directamente con Dios. No creemos que Enlace se abra a la diversidad fácilmente. Pero qué pasará en el futuro.
El futuro de los pueblos lo determinan muchos factores, pero globalmente la agenda económica y política.
Cuál será la señal del poder. Cuáles serán las reacciones de los diversos grupos. De la iglesia, de los partidos tradicionales, etcétera.
Un fantasma recorre el mundo y es el fantasma no del comunismo sino de la diversidad. El comunismo se cayó. La diversidad correrá el mismo destino. Estaremos hablando de una moda pasajera. Puede ser. Pero como nada se destruye sino que se transforma, la entropía vigente, nos ha hecho fijarnos en ese fenómeno peligroso para el sistema, llamado diversidad, pero creado por el sistema por su misma necesidad contradictoria de no desaparecer frente a las partículas de energía libre que han tomado formas nuevas de luchas inesperadas. A veces pienso, lo digo recurriendo a la primera persona gramatical, como nota al margen, que la presidenta Chinchilla que terminó su periodo de forma no muy exitosa no midió estos procesos o sus politólogos asesores se vieron atrapados en resolver energías limítrofes y no atendieron las centrales. Quizá se desgastaron peleando con un dinosaurio o comandante cero. Quizá fueron cercados por fuerzas internas a su mismo partido que apostaron por su desgracia como castigo a no seguir las pautas del jefe. Son solo especulaciones.
Resumiendo lo dicho, diremos que lo que pasa en la física no necesariamente pasa en la sociedad pero son analogías que nos sirven para ver los vapores, los líquidos y las alquimias de lo que sucede en nuestro complejo mundo y sociedades pobres, dependientes y deseosas de armonizar con algo propio, con un destino que la unifique.
La diversidad como doctrina espontánea de excluidos muy excluidos está avanzando. Las religiones se verán profundamente afectadas por todos estos fenómenos nuevos, por todas estas primaveras.
Surgirán nuevos ensayos pero lo viejo no desaparecerá. Estamos metidos en una incertidumbre en que la historia juzgará sabio o ridículo las acciones que tomen los gobernantes y la sociedad civil. Pero aunque los gurúes del orden social nos interpreten y nos tranquilicen frente a toda es revolución de la energía del capital y de sus inte -relaciones socio ideológicas. Aunque nos digan por dónde caminar. Nadie, sabe a ciencia cierta en este momento qué va a pasar ni qué es lo mejor. Frente a esto el mundo ha preferido, disfrutar de la tecnología, chatear y comer porquerías en los grandes centros comerciales que se levantan como templos que acogen a la diversidad, por supuesto a la diversidad como mercado. Prefieren trabajar en lo que se trabaje pero con la meta de disfrutar en el momento presente. De allí el éxito de las religiones de vivir el presente, porque le huye a la sombra, aquella de la cual habló Jung y aconsejaba abordarla para sacarle la luz que se había robado a través de la represión, así mismo, se huye hoy de esa sombra y nos metemos, digo nos, porque todos estamos en eso en la sensación del presente y en las novedades de erotismo social inmediato. Mientras tanto la luz se pierde a través de esas sombras y terminaran tomando cuerpo en nuevas enfermedades, o en las viejas, como la psicopatía moderna, lejos de valores absolutos y de propuestas fundamentales. Todos estamos entonces a expensas de los dueños del poder mercadológico que no saben ni quieren saber de hacia dónde va esta sociedad proyectada hacia los futuros siglos. A quién le importa eso. La misma diversidad aparte de la justeza de sus reales reivindicaciones, aparte de eso y como expresión de lo que venimos hablando, ella es también un símbolo de la causa por el placer inmediato y refrendado por instancias o aparatos ideológicos del estado como los llamaba Altuser.
El éxito actual lo tienen las religiones que avalen el placer inmediato. La prosperidad. La libertad. Y el hombre actual busca la armonía en esos valores inmediatos. La pregunta sigue en pie junto a K. Jung, qué pasará con tanta sombra.
Jesús dijo, la comunidad de fe así lo codificó, que El era la luz del mundo. No toca reflexionar qué implicaciones tendría eso, sin convertir a Jesús en un nuevo fetiche como decían los sociólogos de los años setenta. Lo que hoy prevalece es un Jesús hedónico, promotor del placer inmediato, de la prosperidad como reino, de allí a unos nuevos jesuses como el Jesús de la diversidad vestido con la túnica de colores, no la de José hijo de Jacob sino la del sacerdocio de la gran liturgia del placer, que está celebrando el mundo tecnológico de hoy pagando un precio muy alto que no se ha percatado y sus profetas no quieren ver, el precio de ser gobernado por las sombras. Por el mismo diablo, llamado satanás, lucifer, el que surge del antiguo ángel bello que prefirió el momento presente y no el proyecto de una vida con sentido, con referencias, con valores sólidos. Vivimos en una sociedad marcada a diario por las sombras aplastadas por el placer del momento. Pero la rebelión de las sombras traerá un cataclismo social y después de las crisis mundiales que se avecinan surgirá como inicitiva del creador una sociedad o reino más coherente y luminoso.
Estas son solo reflexiones libres. Gracias